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Contador no deja dormir a nadie

Por Fermín Caballero Bojart , 10 mayo, 2015

Foto: albertocontador.org

La primera fuga de esta edición del Giro de Italia nacía en los alrededores de Albenga por la voluntad de cinco hombres con ánimo de publicitar. Frapporti (AND), Owsian (CCC), Berlato (NIP), Zhupa (STH) y Lindeman (TLJ) aventajaban al pelotón durmiente en 8 minutos a 160 km de meta. Sesteo que hacia pedalear a la carrera a una media de 39 km/h con lo que los relevos entre los fugados daban sensación de una fuerza y alineación, que a más de un equipo le faltó en la CRE de la prólogo.

El Orica-GreenEdge se mantenía al frente del pelotón, con el despertador programado para la segunda parte del recorrido, con el punto de mira puesto en el Pratozanino, una tachuela de cuarta categoría a 53 km de meta, donde los australianos pretendían domar la cabeza de carrera. Antes llegarían las dos metas volantes que pusieron al italiano Frapporti la vitola de la combatividad. La maglia azzurra que tan generosamente señala el esfuerzo en la cumbre fue para el joven neerlandés del Lotto Jumbo Bert-Jan Lindeman, que pasó primero por la pancarta del único paso de montaña puntuable de la jornada.

Pero fue el amarillo Tinkoff lo que despertó a los canguros verdes de Orica. Contador dio órdenes de posición y antes de que terminara el descenso, y con los motoristas de la televisión llevando a la carrera hasta los sofás durmientes de los aficionados, la fuga quedaba amenazada de muerte. Alberto sabía que el circuito genovés era una ratonera y, como gato viejo, no quería sorpresas. Como la que se llevaron algunos chicos del pelotón. En los últimos 40 kms se sucedieron las caídas sin demasiados daños, todos retomaron de nuevo las máquinas, pero a los afectados les supuso la consecuente pérdida de tiempo. Domenico Pozzovivo, candidato fijo al top ten, se dejó la piel para no perder al pelotón, pero finalmente acabó cediendo minuto y medio. AG2R se suma al descalabro de ayer de los Sky.

Momentos antes de iniciarse la segunda vuelta los 5 hombres de fuga eran cazados. Los equipos con opciones de victoria al sprint trataban de hacerse con el mando del pelotón pero los relevos se sucedían tan rápido que apenas se controlaba la cabeza de carrera. A falta de un kilómetro la potencia de Lampre parecía haber tomado la delantera para Sacha Modolo, pero los BMC de Greipel les seguían muy de cerca, hasta que dejaron al alemán solo que un tremendo fallo de cálculo inicio demasiado pronto el sprint, dejando la pelea en bandeja al italiano Elia Viviani (Sky) que no dio tregua a la versatilidad de Moreno Hofland que quedó relegado al segundo puesto. Victoria del italiano dedicada a su mecánico y cambio de líder en la general (Michael Matthews –Orica-) que repite tras los seis días rosas del pasado Giro. Contador pasa al sexto puesto de la general.

Mañana etapa de interior, de 136 kms entre Rapallo y Sestri Levante, con un perfil ligeramente sinuoso, donde una escapada bien trazada puede hacer triunfar el esfuerzo que tendrán que superar los corredores al escalar el puerto de Barbagelata, de segunda categoría, que a pesar de estar a 40 kms de meta supone un largo descenso, idóneo para hábiles rodadores.