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La jefa de los criminales

Por José Luis Muñoz , 20 junio, 2015

Con esa frase irónica escenificaba una tensa Christine Lagarde, de sonrisa forzada, su malestar al dar la mano a Yanis Varufakis por la acusación que lanzó anteriormente Alexis Tsipras ante el comité de Syriza contra el FMI, al que tildó como responsable criminal de lo que pudiera pasar a Grecia y a los griegos. Al margen de ironías, y a juzgar por el presente judicial de los tres últimos presidentes de ese organismo, podríamos decir que sí, que Alexis Tsipras tiene razón.

Lo que está sucediendo con Grecia es de una evidencia que espanta. Desde un primer momento los matones de la Troika, formada por sujetos que no nos representan, gente a la que nadie ha elegido pero tiene un poder omnímodo, hasta el punto de someter a todas las cancillerías europeas, han tildado al ministro de finanzas Yanis Varufakis de chulo y arrogante por defender la dignidad del pueblo griego y ser fiel al mandato de las urnas. Chulo, metrosexual y además guapo, no se le perdona que no lleve corbata a las reuniones o que aparezca en moto, con casco y mochila. Las formas también cuentan en esos exclusivos clubs sociales.

La Troika, y dentro de ella el muy poderoso FMI, intenta por todos los medios torcer la mano a los griegos, rendirlos y humillarlos exigiéndoles el pago de una deuda asfixiante de la que los ciudadanos son víctimas sin ser responsables. Recordemos que el grueso de la deuda griega y su alto déficit presupuestario se debe, entre otras causas, a la recesión mundial, que provocó una bajada de ingresos fiscales; a las sustanciosas subvenciones que con cargo a los presupuestos del estado se llevaban los capitalistas para compensar sus pérdidas durante la crisis; al gasto militar como país integrante de la OTAN y con un claro valor estratégico; a la evasión de impuestos por parte de los poderes fácticos, la iglesia ortodoxa entre otros, pero también los bancos. Y por todos ellos pagan los ciudadanos.

¿Qué piden? Más recortes. ¿Recortes dónde? En las pensiones, por ejemplo. Teniendo en cuenta que ya el anterior gobierno, el que gozaba de todas las simpatías de la Troika por su docilidad, el que falsificó sus cuentas para entrar en la Unión Europea, el que causó ese enorme agujero negro en las finanzas del país, había rebajado las pensiones a más de un 40%, lo que es una salvajada letal, lo que pretenden ahora, que nadie se engañe, es el sacrificio del pueblo griego, su autoinmolación, el genocidio. Y de ahí que las palabras de Alexis Tsipras, insinuando que el FMI es una organización criminal, y no sólo porque están dirigidas por individuos sospechosos que rinden cuentas ante la justicia, cobren pleno sentido, porque sus medidas, las que quieren que se apliquen al pueblo heleno, comportan simple y llanamente la muerte de personas, el acortamiento de su vida, en una matanza lenta y silenciosa en la que no mediarán cañones y así será más barata y menos escandalosa.

Desde los medios de comunicación, desde muchas tertulias, y cito, entre otras, porque la pagamos con nuestro dinero, la de La Noche en 24 horas, que dirige Sergio Martín en sustitución del defenestrado Xabier Fortes, la parcialidad ante el asunto griego es absoluta e hiriente y los tertulianos no hacen otra cosa, entre bromitas de pésimo gusto, que echar toneladas de mierda sobre los griegos: que si son vagos, que si engañan, que si no son gente de fiar, etc., justificando lo que les está pasando, y apuntando a que con Syriza la población helena se ha hecho el harakiri. Es como si el asesino culpara a la víctima de su asesinato. La Troika está ahogando a la población helena, está apretando su cuello, pero la culpa es de ellos, porque Grecia es un pueblo de delincuentes y vagos. Y por desgracia, existe una cierta unanimidad, salvo muy contadas excepciones, en la prensa europea que tiene la misma libertad que la de Nicolás Maduro en Venezuela, y nombro al sucesor de Hugo Chávez sabiendo lo denostado que está, precisamente por eso.

En toda esta crisis interminable, el único que juega inteligentemente, mira por dónde, es Estados Unidos, que está viendo que Grecia se va a ir de Europa, del euro, de la OTAN y se va a echar en brazos de Vladimir Putin, al que le vendrían muy bien los puertos helenos para tener presencia en el Mediterráneo, y pide a la Troika más flexibilidad, que no se les vaya la mano en la tortura. Ayer lo dijo muy claro Alexis Tsipras, Ulises, en un poético y alegórico discurso ante el zar ruso, que juega una partida de ajedrez y precisa de socios para sus planes, hablando de otros centros del mundo que no son Europa, otros puertos y de la capacidad de los griegos para navegar entre tempestades.

Europa es un fracaso, más allá de la supresión de las fronteras y de la comodidad de tener una moneda única, que machacó nuestra economía desde el minuto cero, recordémoslo. Se ha construido la Europa de los mercaderes al margen de la Europa de los ciudadanos, un ente cuya única preocupación ante esas mareas migratorias que están tomando el continente por asalto, huyendo de la hambruna y la tragedia, es hacer más inviable y peligrosa su travesía, y es incapaz de resolver el problema en origen.

Asistimos a unas cumbres europeas en las que unos sujetos que viven a todo trapo, y no se esconden de ello, deciden que los ciudadanos vivamos peor y su única consigna parece ser el saqueo generalizado, quitarnos lo poco que tenemos y hundirnos en la miseria. La Europa de los poderes económicos no puede permitirse que Grecia se salga con la suya, porque puede cundir su ejemplo, y pondrá todos los palos en las ruedas para que el proyecto ilusionante de Syriza fracase. Esa estrategia del fracaso inducido ya se experimentó con enorme éxito en el pasado con gobiernos democráticos de izquierda elegidos en las urnas en Latinoamérica. Pero allí tuvieron que emplearse los cañones para redondear la operación.

El mensaje que está lanzando la jefa la organización criminal, según sus propias palabras, es que la democracia sólo es válida si está al servicio de sus intereses. El resultado de las elecciones en España, que preocupa a los poderosos, y ya lo estamos viendo cuánto, va a hacer que las medidas para ahogar a Grecia se aceleren de aquí a noviembre.

Alguien lleva tiempo maniobrando para que el mundo sea cada vez peor. Spectra, como diría el desaparecido Manuel Vázquez Montalbán.