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¡Música, maestro!

Por Clara Cordero , 19 marzo, 2014

By Clara Cordero

No bastan los numerosos estudios que asientan la música como la base del desarrollo de una necesaria inteligencia afectiva clave en el proceso de aprendizaje, sino que además constituye una de las fuentes primarias de la cultura de cada sociedad. Hablamos de la manera de llegar las historias y los conocimientos pueblo a pueblo y de perpetuarlo.

Este post surge de la necesidad de una educación integral, adecuada a los nuevos tiempos, donde se impone la creatividad y la motivación, donde las artes deben ocupar espacios, donde aprendemos desde y con mil maneras, donde los docentes que imparten música y se han preparado para ello no queden desplazados como algo inútil.

Este post nace desde la queja de adonde estamos dispuestos a llegar con la educación, de por qué limitamos los aprendizajes, en lugar de dejarlos fluir.

Este post nace de la nueva ley de Wert donde la música pasa a convertirse en asignatura optativa a elección de las CCAA y las escuelas. Donde integramos en «educación artística» lo que parece que sobra del currículum.

Y, no sólo, es que vamos hacia atrás como lo cangrejos, dejamos de lado avances tecnológicos, muchos de ellos centrados precisamente en el audio y el sonido, es que además dejaremos de disfrutar, más todavía, del aprendizaje. Porque una buena melodía no enseña muchas cosas. Nos enseña ritmo, emoción, conceptos, actitudes, leyes físicas y matemáticas, memoria, movimiento, etc.

Y, la otra cara de la moneda, la desigualdad que genera que unas CCAA opten por ella y otras no. Definitivamente de entre los que no optarán por ella dejarán a nuestros estudiantes peor preparados para la vida, ¡y eso que buscamos la excelencia!

Y, que decir, de las oportunidades que ofrece la música a niños con alguna dificultad de aprendizaje. Sin ir más lejos el vídeo que ha recorrido las redes estos días y que os dejo a continuación, donde gracias a la habilidad y esfuerzo de un maestro y a la música, un alumno consigue integrarse y seguir aprendiendo.