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Ninguno de los modos de transporte en España cubre sus costes

Por José Julián Martín , 1 junio, 2017

Trenes

Según el informe Las Cuentas del Transporte en España, presnetado esta mañana en las oficinas de Fedea en Madrid, ninguno de los modos de transporte en España cubre sus costes y es necesaria una homogeneización fiscal y tarifaria en todos ellos, destacando también que hay espacio para una mejor gestión en el ferrocarril.

El contenido del informe pone en evidencia lo que cada modo de transporte cuesta y quien lo paga. Además, se desagrega por medios de transporte (turismos, camiones, etc., en carretera; viajeros, mercancías, etc., en ferroviario). El estudio informa de lo que nos cuesta cada cosa (costes privados y medioambientales) y quien lo financia (pago directo o mediante impuestos), lo que resulta esencial para una política de transporte mínimamente seria.

El trabajo ha sido realizado por José Manuel Vassallo, director del Departamento de Ingeniería Civil, Transporte y Territorio de la ETSI de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid y profesor en el área de economía y financiación del transporte; Armando Ortuño, profesor de Urbanismo, Ordenación del Territorio y Planificación del Transporte en la Universidad de Alicante; y Ofelia Betancor, Profesora de Economía en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria.

José Manuel Vassallo indicó también esta mañana: «Hay que valorar si podemos dar un servicio público con menos subvenciones en alguno de los modos de transporte» (en referencia a los cercanías). Se trata de garantizar el transporte a menos coste económico in aumentar el coste social».

El informe apunta que tanto la carretera como el modo aéreo cubren sobradamente los costes de infraetructura, lo que no ocurre con el transporte marítimo y el ferrocarril. En este último caso puede observarse cómo las subvenciones a la operación son superiores a los que pagan los operadores por usar la infraestructura, por lo que el ratio obtenido resulta negativo.

En cuanto a la tasa de cobertura de los costes, en ninguno de los modos los ingresos llegan a compensar los costes de infraestructura, externos de accidentes y medioambientales, aunque las cifras son notablemente distintas entre ellos.

Algunas de las conclusiones del informe apuntan a que desde un punto de vista muy medioambientalista, el AVE se iguala con otros modo de transporte, que el ferrocarril es el modo con menores costes externos y el más limpio, pero genera muy pocos recursos, y que el coche privado tiene costes muy elevados, pero es que más contribuye por los elevados impuestos especiales.