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Pablo Iglesias ilusiona en Galicia, gracias a la ruta del cambio

Por Iván Cernadas , 6 julio, 2015

Veni, vidi, vinci. Pablo Iglesias en su visita a Vigo, vino, vió y venció. El secretario general de Podemos, visitó Vigo en un Auditorio Mar de Vigo prácticamente lleno, que lo recibió con los brazos abiertos a pesar de tardar poco más de veinte minutos, y otros diez en llegar al estrado mientras se dedicaba a saludar a la gente.

El líder de Podemos, en su vista a Vigo en el Auditorio Mar de Vigo: Fuente: Iván Cernadas

La visita a la ciudad más grande de Galicia, se encuadra en la llamada «Ruta del cambio» que recorre toda España, y que comenzó en Cádiz el pasado 19 de julio.

Ayer dió comienzo en la comunidad gallega, en Ferrol, donde se dió un baño de multitudes en el Parque de Amboage. Mientras, hoy en la ciudad olívica, el político madrileño también consiguió meterse al público en el bolsillo, y casi llena el escenario con unas 1.300 personas.

Durante la casi hora y media que duro el acto, estuvo acompañado de los representantes de la formación en Vigo, Carmen Santos que hablo primero y José Manuel Prieto, escogido secretario general en la ciudad el pasado enero. Más tarde, fue el turno de Irene Montero, secretaria de Coordinación de Podemos, y Breogán Riobóo, secretario xeral en Galicia.

Los portavoces de Podemos caldearon el ambiente, antes de la intervención de su jefe. Utilizando el lema en gallego de «A nosa patria é a xente (Nuestra patria es la gente)», Irene Montero conseguía el aplauso del respetable. El tono de sus compañeros, fue el mismo, afirmando que «hay otra forma de hacer las cosas, que es el turno dedevolver el poder al pueblo».

Carmen Santos, Pablo Igleasias, Breogán Riobóo, Irene Montero y José Manuel Prieto, miembros de Podemos. Fuente: Iván Cernadas

Discursos en ciudades obreras

Todos ellos, hicieron mención de historias parecidas, recordando el espíritu obrero de Vigo y Ferrol, como focos de la lucha sindical poniéndolos, como ejemplo, para seguir luchando por nuestros derechos. Ese espíritu de lucha gallego, se demostró con creces durante la tragedia del Prestige y el nacimiento de Nunca Máis, que unido al éxito de las pasadas Mareas gallegas, fue recordado con motivo de orgullo y vinculado al inicio de Podemos, junto al 15M.

Después del discurso de los políticos gallegos, le tocó el turno a su dirigente. Iglesias inició su discurso haciendo un guiño a la situación actual de Grecia, culpando a la troika, a Merkel y Christine Lagarde, directora del F.M.I. y la sexta mujer más poderosa del mundo, afirmando que:»las políticas de recortes no funcionan». El dirigente madrileño cargó de culpabilidad al F.M.I, por no aceptar una última oferta presentada por el presidente griego, y afirmó que la situción actual de Grecia es «terrorismo financiero».

Guiño a las «mareas gallegas»

Asímismo, Iglesias recordó la obtención de alcaldías como Madrid, Barcelona, Cádiz, y en el caso de Galicia, las denominadas «Mareas» de A Coruña, Santiago y Ferrol por parte de formaciones afines a la suya. Por ello, ofreció unir lazos con estas propuestas gallegas, aunque bajo otra marca y conseguir que Podemos esté «más fuerte» después del 24-M y que el cambio en España se encuentra «más cerca».

Beiras e Iglesias, historias paralelas

La respuesta de las Mareas, en una reunión el pasado viernes con sus líderes, los alcaldes de Santiago y Ferrol, junto a Xosé Manuel Beiras y Yolanda Díaz de Anova fue bastante positiva. Precisamente fue Beiras, a quien Pablo le pidió consejo en el 2012, para iniciar la andadura de Podemos, volviendo de nuevo a pedirle ayuda. Después de la visita a Galicia este fin de semana, según ha informado Podemos, Pablo Iglesias y su equipo continuarán su visita por toda España, en los próximos meses recoriendo el país «encontrándose con los principales actores del cambio». Todo ello, para escuchar sus inquietudes, iniciativas y propuestas e incorporar las «demandas ciudadanas al proyecto que ganará las próximas elecciones generales. Desde luego en Vigo así lo creen, ya que al acabar el mitín Iglesias era coreado al nombre de «presidente, presidente».