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Pagar por trabajar

Por Alicia Ibarra Gámez , 4 febrero, 2014

Esto es con lo que se han encontrado todos los periodistas culturales que han querido obtener información sobre las acreditaciones para el Primavera Sound 2014:

“La acreditación de prensa para Primavera Sound 2014 en Barcelona tiene un precio de 50 €. Esta novedad tiene como objeto favorecer las condiciones de trabajo y la experiencia global de los medios acreditados antes, durante y tras el evento”.

Así es, se trata de la nueva moda: pagar por trabajar. La indignación de la mayor parte del sector cultural se ha hecho notar en Twitter bajo el hagstag #primaverasound. Muchos medios online, que han visto cómo en los últimos años crecían sus lectores y sus ingresos gracias a la cobertura de eventos musicales -como son los festivales veraniegos- están ahora preocupados por la medida: “ese precio sólo pueden permitírselo los grandes medios y van a dejar fuera a todos los demás”.

Pero no es la primera ni, desgraciadamente, la última vez que pasa. Anteriormente medios como El Economista o Periodista Digital denunciaron “ofertas de empleo” para periodistas deportivos en las que había que pagar 100 euros por cada mes en la empresa.

¿En qué profesiones hay que pagar para trabajar? ¿Por qué hay que pagar para realizar el derecho democrático de informar a los ciudadanos? ¿Hasta cuando va a soportar la prensa estos abusos? ¿Qué piensan hacer para evitar una práctica cada vez más común?

Algunas de las soluciones las encontramos en plataformas como Gratis no trabajo: un espacio de denuncia, en diferentes redes sociales, donde los jóvenes pueden compartir y evitar que situaciones tan abusivas se lleven a cabo. En la mayoría de los casos se trata de estudiantes que están en su último año de carrera y que se ven obligados a llenar el currículo con prácticas no remuneradas.

Es importante destacar que no se trata de una idea creada y fomentada por el poder para callar la boca a los periodistas, sino que somos nosotros mismos quienes fomentamos esta situación. Periódicos como El País o El Mundo ofrecen másteres a periodistas licenciados o graduados a un precio que oscila entre los 10.000 y los 15.000 euros, con garantía de un puesto de prácticas remuneradas que varía entre los 6 meses y el año. ¿Están pagando ese precio del máster para intentar entrar en un periódico? ¿Se podría considerar que están pagando por conseguir un puesto de trabajo? La respuesta es sí, ya que estos dos periódicos escogen mayoritariamente a gente de su máster para las prácticas.

¿Cómo se puede matar a un monstruo cada vez más grande y al que nosotros mismos damos de comer?