Portada » Columnistas » Podemos + Izquierda Unida el 26-J: Una oportunidad histórica

Podemos + Izquierda Unida el 26-J: Una oportunidad histórica

Por Carlos Almira , 10 mayo, 2016

Se ha producido un acuerdo electoral entre Podemos, por una parte, e Izquierda Unida, Unidad Popular, por otra, para concurrir a las próximas elecciones generales del 26 de junio. Este acuerdo podría tener una importancia histórica, que iría más allá de la situación política española si logra contagiarse a otros países europeos, donde empieza a crecer y a organizarse el descontento ciudadano, como es el caso de Francia ( movimientos como Nuit Debout,  Economistas Attac, etcétera).

Los españoles podemos decidir en estas elecciones, entre estas dos grandes opciones que, a riesgo de simplificar la realidad, pueden describirse como sigue:

La primera, favorable a los de arriba (llámense de izquierdas, de centro o de derechas), representada por el PP, Ciudadanos y el PSOE, y bendecida por todos los poderes económicos y por las actuales autoridades e instituciones de la Unión Europea: consiste básicamente en poner el acento en el déficit público, en vez de hacerlo en el aumento de los ingresos fiscales (fiscalidad progresiva y lucha contra el fraude fiscal); en favorecer los derechos de las grandes empresas frente a los trabajadores y los consumidores (incluida la clase media); y en recortar todos los derechos y libertades ciudadanos que puedan poner en cuestión o incluso en riesgo, el estatus quo así descrito, con el pretexto de la Globalización Económica, y la libertad sin límites de las empresas para deslocalizar sus inversiones en cualquier momento.

La segunda, favorable a los de abajo, incluida aquí la clase media, representada por la confluencia de Podemos (con todos sus grupos y afines) e Izquierda Unida, Unidad Popular, es la inversa de la anterior: consistiría básicamente en poner el acento en el ingreso fiscal y no en el gasto público, (fiscalidad progresiva y endurecimiento en la lucha contra el fraude), replanteando fuera de los mercados financieros privados, la financiación futura del Estado; favorecer los derechos de trabajadores, consumidores y parados frente a los intereses de las grandes empresas privadas; y ampliar y profundizar las libertades ciudadanas, incluidas las de participación en la toma de decisiones políticas, en asuntos que nos conciernen a todos.

Creo que los españoles tenemos una oportunidad histórica en estas elecciones, que no deberíamos desaprovechar ni tomar a la ligera.

En vez de preguntarnos cuántos puestos de trabajo precarios y mal pagados, podrá ofrecer, en el futuro, Burger King a nuestros hijos y nietos, preguntarnos cuántas escuelas, ambulatorios y centros de día podrán contribuir a construir y mantener con sus impuestos, en España, sus accionistas.

Así de sencillo.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.