Una merienda de locos

—Voy a servirme un té con limón. —Dijo el sombrerero loco.

—Allí en el otro lado de la mesa tienes la tetera. —Respondió el Lirón.

—¡Espera amigo! Mejor una buena taza de chocolate caliente.

—Voy a buscártela. —Insinuó la Liebre de Marzo.

—¡Noooo! Mejor probaré la leche con miel.

 

¿Estás sintiendo que el mundo se ha vuelto completamente caótico y desafiante y te cuesta encajar en él?

Respira con tranquilidad, te has visto abducido por  la “Merienda de locos” de “Alicia en el país de las maravillas”…te recuperarás.

¿Pero, recuerdas cuántas veces has visto esa escena sin entender absolutamente nada? Claro que sí, pero seguías mirando a los personajes pensando que Alicia encontraría la solución a sus problemas, aunque puede que en la actualidad, esta escena no sea tan inusual y extraña. Quizá inducirse en esa dinámica sea una opción mejor que nuestro contexto, porque soñar es divertido, la realidad NO.

Volvemos a vivir una nueva oleada de desorden mental globalizado que asusta. La visión del trabajo, su remuneración, la manera de entender la vida y como vivirla, está cambiando en las nuevas generaciones y su “modus operandi” está contagiando a las anteriores. Las personas ya no están dispuestas a sacrificar su bienestar por el trabajo. No quieren asumir responsabilidades y si eso significa una menor retribución, no les importa. El concepto de “mejor estatus” y “mayor responsabilidad”, implica que deben sacrificarse más, para obtener menos resultado y esto carece de valor y atractivo.

Si encima le añadimos, esa parte emocional de adaptación a los cambios constantes, la frustración de lo que uno espera o quiere vs lo que encuentra y ve, puede activar a cualquier  bomba expansiva, y todos conocemos que significa eso….

Pero el mundo sigue girando y mientras tanto, el impacto normativo que implica la imposición de directivas europeas, transposiciones legales pendientes, inseguridad y complejidad jurídica, va navegando por el territorio, conmocionando a todo ser viviente, porque ¡aquí amigos!, no hay individuo que no se vea afectado… otra onda expansiva…

Y como España va bien…. en el centro del mapa se sitúa esa bola mágica que tanto ansiamos que nos dé una solución, pero que solo nos muestra nuestros propios defectos. Fuga de talentos, desajuste entre personas candidatas y empresas, absentismo laboral que ya ocupa el 3,2% PIB, baja productividad, sectores económicos  fracturados y agotados, falta de comunicación y empatía de las administraciones…ahhh y la guinda del pastel de la merienda… un gobierno y oposición que juegan a sacar la ropa sucia en una pintoresca telenovela de bajo presupuesto… y nosotros tomando café…si ya lo decía yo… Made in Spain.