Y en México el 66% de las mujeres sufren violencia…
Por Trixia Valle , 5 marzo, 2019
«Miila» Acuarela por Sara Sánchez
A unos días de celebrarse el Día Internacional de la Mujer, y aunque parezca difícil de creer, a la luz del siglo XXI, México encabeza la lista de la región en violencia contra las mujeres. Esto considerando que el porcentaje de casos que se denuncia es muy bajo y se ha estimado que en México sólo 26% de las mujeres que han sufrido violencia física o sexual por parte de su pareja acude a la policía o con alguna autoridad pública; este porcentaje varía, a su vez, por el tipo de violencia recibida: sólo 4% de las mujeres víctimas de violencia sexual acude con las autoridades (Frías, 2013).
Para dimensionar lo que ocurre:
- En 2016 hubo 2,813 asesinatos a mujeres, 8 diarios.
- 45 de cada 100 mujeres sufren violencia en sus trabajos.
- Las más expuestas tienen entre 20 y 29 años.
- 66.1% de los 46.5 millones de mujeres mayores de 15 años sufren violencia.
Y con todo esto, AMLO, es decir el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha decidido quitar el presupuesto para las casas de seguridad y asistencia de las mujeres violentadas en nuestro país, pues hoy vivimos una crisis debido a la desconfianza del gobierno hacia las ONGs, con la instrucción de:
La cancelación habría obedecido a la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de “no transferir recursos a ninguna organización de la sociedad civil”.
¿Por qué? Bueno porque él dice que los FIFIs, o sea, la gente de dinero, educada y pudiente, que atendía las causas de la sociedad de buena fe, son aliados del régimen anterior y que por ello deben quedar suspendidos los fondos que se les daban.
¿Y qué van a hacer? ¡Ah! Pues la respuesta mágica ante todo, darles dinero a las víctimas para que ellas resuelvan sus problemas. Muy bien ¿y cuánto? pues más o menos como cincuenta euros al mes. Si casi te da un ataque de risa, no eres el único, a todos nos da esa misma sensación de una broma mal intencionada o algún error en los cálculos, pues ni en México, ni en España, nadie resuelve sus problemas para salir de la violencia intrafamiliar, con tres o más hijos, con ese presupuesto.
Las casas de asistencia recibían fondos del gobierno, pero también los recaudaban con sus propios medios para poner inmuebles de seguridad, con comida y todos los servicios, además de atención psicológica, cuidado de los niños, atención médica y apoyo moral, que nadie en un cuartucho pagando cincuenta euros al mes podría recibir. Esto sin contar el amor, el servicio, el apoyo, que me consta y he visto, que dan las personas al servicio de las mujeres quienes son víctimas de violencia.
Pues ahora, nada, no hay nada para poder mantener estos servicios de ángeles en la Tierra. Quizás habrá algunos que puedan subsistir con sus propios recursos, pero yo, que personalmente dirigí una ONG, sé que no hay dinero que alcance para ayudar a las muchas personas que lo necesitan.
Me gustaría agregar que la violencia hacia las mujeres en México tiene un factor importante derivado de los usos y costumbres que prevalecen hasta nuestros días y que nos impiden poner límites ante los «machos» de antaño. Para comprender mejor esto, les ofrezco a mis lectores durante el mes de marzo, descargar gratuitamente mi cuento ganador del 2o lugar del Premio Nacional de Cuento «Por una vida libre de violencia para las mujeres y las niñas», al acceder a www.trixiavalle.com o enviar el formulario anexo a este artículo para recibirlo.
Y mientras esto sucede… México duerme.
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