Canelones con espinacas, piñones y pasas

Para variar un poco, tras las suculentas recetas cárnicas, he pensado que no estaría mal un poco de pasta. Sí, es unos de los platos con más calorías. Pero están riquísimos, y de vez en cuando, es bueno alimentarse con hidratos de carbono con relleno vegetal.

Un plato repleto de proteínas, calcio, hierro y todas las vitaminas del grupo B. Además, os aportarán la energía necesaria para los últimos coletazos del invierno.

Ingredientes para 4 personas

• 20 0bledas de canelones
• 400 grs. de espinacas frescas
• ½ litro de leche desnatada
• 100 grs. de queso rallado
• 2 cucharadas de piñones
• 2 cucharadas de pasas
• 1 cucharada de mantequilla
• 1 cucharada de harina
• 1 cebolla
• Aceite
• Nuez moscada
• Pimienta
• Sal

Preparación

1- Hervir las obleas en abundante agua con un puñadito de sal. Una vez cocidas, pasarlas por agua fría y escurrirlas sobre un paño de cocina. Reservarlas.

2- Rehogar la cebolla picada en una sartén con un poco de aceite.

3- Añadir las espinacas y dejarlas cocer hasta que hayan absorbido el agua.

4- Agregar los piñones y las pasas. Dorar la mezcla durante unos minutos.

5- Preparar la bechamel con la mantequilla, la leche, la harina y una pizca de nuez moscada.

6- Para el relleno, mezclar seis cucharadas de bechamel con las espinacas de piñones y pasas.

7- Una vez rellenos, cubrirlos con el resto de bechamel y espolvorearlos con el queso rallado. Gratinarlos unos minutos en el horno a máxima potencia.

Mis consejos

Si tenéis oportunidad de elegir un queso curado y rallarlo vosotros mismos, mejor. Le dan un toque especial y están más sabrosos que con el queso rallado embolsado.

Podéis utilizar cualquier marca de piñones y pasas. Si tenéis un mercado cerca, os aconsejo que los compréis a granel. Siempre tendrán menos tiempo y podréis ahorraros algunos euros.

Si no eres amiga de la mantequilla, también puedes sustituirla por un chorrito de aceite de oliva.

Recomiendo acompañarlos con un vino Chianti de la Toscana

Como elaborar una bechamel sin mantequilla

Disolver la harina en agua y añadirla, poco a poco, a la leche hervida. Removiendo constantemente para que no salgan grumos. Cocer durante unos minutos hasta que vuelva a hervir y condimentar al gusto, poniendo un chorrito de aceite de oliva al final.