De las viñetas de El Roto y nuestro mundo de hoy
Por Agustín Ramírez , 25 julio, 2014
En un librito de viñetas del año 2011 de don Andrés Rábago, más conocido por El Roto, -EL ROTO. Viñetas para una crisis- hay una en la que un orador, desde un estrado con el símbolo del dólar, se dirige a una masa de oyentes diciéndoles: “Nos llevamos millones y el Estado los repuso, ¿cómo pueden decir que el sistema no funciona? Clarividente El Roto, como siempre.
En estos días finales de julio se ha hecho pública la venta de Catalunya Banc al BBVA, la consecuencia de esta venta es que el Estado español, o lo que es lo mismo, todos los españoles, pierde más de 11.500 millones de euros; esta información se complementa con otra de hoy en la que se informa de que el dinero aportado por el Estado español para el rescate de la banca ha sido superior a los 60.000 millones de euros, pero lo peor no es tanto el volumen de lo que hemos aportado los españoles como que de esos 60.000 millones, los españoles, el Estado español, no va a recuperar más allá de un 5%. Y me pregunto y no de manera inocente: ¿qué castigo tienen los responsables de los descalabros bancarios? Ninguno, el castigo es para quienes hemos visto recortada nuestra calidad de vida para dar el dinero a esas entidades que han sido gestionadas por personas como Rodrigo Rato, Miguel Blesa, Narciso Serra y otros, con la complicidad de demasiada gente, tanto en los consejos de administración de las entidades rescatadas, como en el Banco de España o en la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
A la vista de estas cifras tiene más vigencia otra viñeta del mismo libro y autor antes citado, en la que se ve un yate de lujo y su leyenda reza así: “Desde los yates se elevaban voces airadas reclamando más recortes sociales”. Me pregunto: ¿habrá inspirado esta viñeta a nuestros gobernantes y a nuestros dirigentes patronales? Tampoco me sorprendería.
Este gobierno y su círculo de corifeos económicos se empiezan ahora a jactar de que España está empezando a salir de la crisis; nos intentan engañar con cifras de crecimiento económico, con que el paro está disminuyendo –de manera lenta pero continuada, eso sí- con que la confianza internacional es grande en España, tal como refleja la prima de riesgo; con que ahora ya estamos en situación de bajar los impuestos –aunque los análisis digan que su reforma fiscal solo beneficiará, fundamentalmente, a las clases más adineradas- y es que siempre encuentran la triquiñuela para intentar engañar al ciudadano. Son como trileros de la información o, quizás, hayan recordado otra viñeta de El Roto en la que dos sombras comentan: “le estamos haciendo pruebas de resistencia al personal para ver hasta donde aguantan”.
La falta de calidad del empleo, las rebajas salariales, los tijeretazos de la reforma laboral, los recortes en sanidad, los recortes en educación, los recortes en investigación, entre otros, no son sino la respuesta que el poder da a la crisis, porque como dice otra viñeta del mismo autor y del mismo libro: “no os preocupéis, el sistema capitalista renacerá de vuestras cenizas”.
A la vista de todo lo anterior, la última viñeta del citado libro y autor es buen cierre para estas líneas: “oscurece, por lo tanto amanecerá”.
Pero no quiero terminar sin recordar el genocidio que el estado de Israel está cometiendo con la población palestina de Gaza. Israel ya ha ocasionado la muerte de 580 palestinos y ha herido a 3.600 personas de la franja de Gaza. No quiero terminar sin recordar la violación sistemática del Estado de Israel del Derecho Internacional. No quiero terminar sin maldecir la inoperancia y la hipocresía de la comunidad internacional (ONU, UE, países individuales, especialmente el presidido por un injusto premio Nobel de la Paz.) ante el problema palestino y su servilismo hacia el poder del Estado de Israel; solo palabras, pero pocas y que no molesten. Prefiero citar una última viñeta de don Andrés Rábago, El Roto, cuando viéndose un cadáver flotando en el mar, la leyenda dice: “¿qué importa hundirles un poco más si ya están ahogados?”
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