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El Museo Lázaro Galdiano estrena dos nuevas exposiciones

Por Laura Ávila , 23 mayo, 2014

Lugar: Fundación Lázaro Galdiano

Fecha: 28 de mayo.

Dirección: c/Serrano 122. Madrid.

Con el dinamismo que caracteriza a la Fundación Lázaro Galdiano proponen dos nuevas exposiciones temporales para el próximo 28 de mayo.

La primera de ellas es Coleccionar, una pasión compartida. Antonio Rodríguez-Moñino, amigo de José Lázaro, que será clausurada el 6 de julio.

La exposición se ubica dentro del programa “Arte invitado” y se realiza gracias a la colaboración de Acción Cultural Española y de la Real Academia Española.

Las obras expuestas proceden de la colección reunida por el bibliógrafo, bibliófilo y filólogo Antonio Rodríguez-Moñino (1910-1970) y su esposa María Brey (1910-1995) bibliotecaria y también bibliógrafa.

Entre las obras que conforman la muestra se encuentran cinco dibujos de artistas como Claudio Coello, Matías Arteaga o Leandro Alenza; cinco estampas de Durero, Van Dyck o Ribera, entre otros, y dos manuscritos de Neruda y Quevedo.

Aunque de dimensiones reducidas la presente exposición muestra especial interés debido al diálogo establecido entre las colecciones de estos dos amigos que compartieron la pasión por el arte, el coleccionismo y la bibliografía y, ahora, vuelven a encontrarse en el Palacio de Parque Florida.

Damaso Alonso, dijo de su amigo Rodríguez-Moñino que en su colección nunca importó el número, sino la selección, y que estaba dotado de “una poderosa inteligencia, un conocimiento y una actividad puestas, ante todo, al servicio de la bibliografía y de la cultura española”.

La otra exposición que también se inaugura el 28 de mayo es Biblias en la Biblioteca Lázaro: Exposición conmemorativa del V centenario de la Políglota Complutense.

La Biblioteca de la Fundación Lázaro Galdiano conserva entre sus fondos medio centenar de Biblias que José Lázaro, editor, coleccionista y bibliógrafo atesoró a lo largo de su vida.

La primera parte de la exposición recuerda el complejo e incompleto proceso que supuso el intento de descubrir el eslabón primitivo de los textos bíblicos. Así la Vulgata se muestra en tres códices medievales. Además se exponen las dos ediciones políglotas del siglo XVI: la Complutense y la de Amberes.

La segunda parte exhibe otros ejemplos notables de manuscritos e impresos. El público podrá descubrir biblias traducidas al inglés, griego, etiópico, armenio, rumano y español, como la conocida “Biblia del Oso” de Casiodoro de Reina de 1569; y también biblias ilustradas de los siglos XVI a XVIII.

La exposición concluye su recorrido con una magnífica edición de la Biblia de Pierre Sabatier del siglo XVIII y se podrá visitar hasta el próximo 15 de septiembre.


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